viernes, 10 de febrero de 2012

Somos el libro de nuestros hijos


Una curiosa reflexión sobre la "clase de libros" que somos para nuestros hijos. ¿Somos realmente conscientes de la importancia de nuestro ejemplo para la vida de nuestros hijos? 
"Como padres, debemos recordar que nuestra vida puede ser el libro de la biblioteca familiar que más atesoren los hijos. ¿Es nuestro ejemplo digno de emular? ¿Vivimos de tal modo que un hijo o una hija pueda decir "Quiero seguir a mi padre" o "Quiero ser como mi madre"? A diferencia del libro del estante de la biblioteca, cuyas cubiertas protegen su contenido, nuestra vida no puede estar cerrada. Padres, en verdad somos un libro abierto en la fuente de aprendizaje de nuestro hogar.
¿Somos un ejemplo del legado del amor? ¿Lo son nuestros hogares? Bernadine Healy aconsejó lo siguiente durante un discurso pronunciado en una entrega de diplomas:
"Como doctora en medicina que ha tenido el gran privilegio de compartir los más profundos instantes de la vida de las personas, incluso sus últimos momentos, permítanme contarles un secreto. La gente que se enfrenta a la muerte no se pregunta qué títulos académicos ha conseguido, qué puestos ha desempeñado o cuánta riqueza ha acumulado. Al final, lo que verdaderamente importa es quién te ha amado y a quién has amado. El círculo del amor lo es todo y constituye una excelente medida de nuestra vida pasada. Es el don de mayor valor" (Pte. Monson, CR Oct. 2000)

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