Fríes cebolla y calabacín cortado en dados pequeños dejándolos pochar.
Añades carne picada (la que prefieras) y cuando esté lista rellenas con ella unos pimientos del piquillo asados con leña (de lata) sin llegar al borde.
El resto hasta el borde lo rellenas con queso rallado (mejor la mezcla "cuatro quesos").
Colocas los pimientos rellenos en una fuente para horno y viertes sobre ellos un brick de nata para cocinar (unos 200 ml para 8 pimientos) espolvoreando un poco más de queso por encima (ojo, solo un poco).
Se mete al horno a 200 grados unos minutos hasta que la nata tome color dorado y: a disfrutar!! Bocatto di cardinalle!!
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